jueves, abril 05, 2007

No entiendo nada... o prefiero no entenderlo

La Fiscalía de Cataluña está investigando dónde van a parar los fondos que recibe la ONG Intervida (una de las mayores de España, con 400.000 socios) . Se sospecha que el dinero recaudado a base de agitar la conciencia de la gente ha sido usado para tapar deudas de empresas propiedad de directivos de la ONG. El asunto está en los tribunales así que habrá que esperar a que ellos decidan. Hace unos meses otra ONG, ANESVAD, acabó siendo condenada.

El tema me viene al pelo para hablar sobre una cosa que no he entendido nunca: la existencia de ONG y la "acción social" de las empresas.

Vaya por delante que respeto, y mucho, a la gente que da dinero a ONG y proyectos de ayuda y admiro a la gente que se va a construir escuelas o vacunar niños a países pobres. Lo que no acabo de entender es cómo, en unas sociedades que mayoritariamente están por ayudar a los países sin desarrollar, estas obras se dejan en manos de la voluntad de la gente mientras los Estados no se involucran de verdad y hasta el fondo (se preveía que los países ricos donaran el 0,7 en los 70 y, salvo los nórdicos, ninguno llega a día de hoy) en la lucha contra el hambre, la pobreza, las enfermedades erradicadas en el mundo rico, los niños soldado y una lista demasiado larga. Si los Estados asumieran sus responsabilidades (aunque ello implicase subidas de impuestos), las ONG no tendrían que existir. Hacen una gran labor pero no es lo mismo Europa y EEUU luchando de verdad contra la miseria en el mundo que todas las ONG (y no es reproche hacia éstas). La ONU lo ha dicho en repetidas ocasiones, si el mundo desarrollado se pone las pilas toda la población mundial tendría resueltas las necesidades vitales (sanidad, educación, electricidad, vivienda) en diez años.

Por otro lado, y creo que algo relacionado está (en lo relativo a la dejadez de los gobiernos), la acción social de las empresas o responsabilidad social corporativa. El Estado deja cada año que pasa más margen para que sean las empresas las que financien obras de restauración, de conservación de espacios naturales y similares. Cosas en las que el primer interesado, además de ser su obligación, son las mismas instituciones pero a pesar de ello son las empresas las que se encargan en una parte significativa. Y además, tratándolo como si fuera una campaña de marketing, "si ayudamos a financiar este proyecto, nuestra imagen de marca evocará a verde, a limpio. Caeremos más simpáticos y venderemos más. Encima desgravaremos a Hacienda" (también ocurre con las donaciones a ONG, otra cosa que no entiendo). He leído artículos de economistas sobre responsabilidad social corporativa y dan ganas de vomitar. La solidaridad convertida en puro merchandising. Eso sí, que a ningún gobierno se le ocurra decirle a una empresa que gasta 400.000 euros en rehabilitar un pueblo, por poner un ejemplo, que se les suben los impuestos en 300.000 euros para fines sociales o ecológicos, que menuda oposición se encontrara cuando la solidaridad ya no haga vender más refrescos o coches.

Para acabar, un artículo sobre donantes de Intervida y otro sobre las presuntas irregularidades.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Volverse a partir de vacaciones rápidas de la raya vertical de la excursión al desierto. Colgado hacia fuera con algunos amigos y volverse a la derecha antes de la semana del trabajo. El fin de semana fue por apenas demasiado rápido. Teniendo demasiada diversión el practicar surf en el océano y el practicar surf de la red para .

Anónimo dijo...

No he pillado el comentario del desierto, pero respecto a lo de Intervida y Anesvad, si quieres entender menos, aquí te adjunto lo ultimo publicado por El Mundo sobre el tema
http://www.elmundo.es/papel/2007/04/29/espana/2116317.html

Defender of the Faith dijo...

Gracias Javier, pero con el título me refería a lo que creo que es hipocresía en torno a las ONG y a la acción social de las empresas tanto por parte de los gobiernos como por las empresas. Lo de Intervida simplemente fue el gancho para hablar de eso