La financiación futura de las comunidades que están reformando su Estatuto está negando una realidad, y es que el dinero a repartir es finito y no se puede pasar del 100 por 100. Tres ejemplos, en Cataluña piden que el Estado les dé pasta proporcionalmente a su peso en el PIB, en Aragón pedimos que a nosotros se nos dé según el territorio y a Andalucia por su población. Los estatutos no están ratificados todavía y con el juego que dan parece que no van a estarlo nunca así que las cosas pueden cambiar mucho o nada, a saber.
Si finalmente se aprueban tal y como están los aragoneses nos llevaremos el 9,4 por ciento (nuestra superficie) de los PGE con una población del 2,85 %, los catalanes el 20,8 (su PIB) con el 15,88 de la población y los andaluces el 17,2 (su población). Es decir, entre tres comunidades autonómicas que suman el 32,9 del territorio, el 37,8 del PIB y el 36,57 de la población, se repartirá casi la mitad del dinero (el 47,4 por ciento) que, en teoría, tendría que ir a parar a todo el Estado.
No sé qué financiación piden las otras comunidades que están reformando sus Estatutos (Valencia o Baleares, por ejemplo; supongo que también pedirán lo que les vaya mejor, ya sea su aportación al PIB, los kilómetros de costa o, tirando de tópico, los turistas alemanes y los campos de golf) pero de seguir así, el Estado central tendrá que repartir más del 100 % del dinero que tenga para cumplir los nuevos Estatutos y eso es matemáticamente imposible.
¿No sería más fácil y menos conflictivo a la larga una financiación autonómica que en vez de basarse en lo que más interesa a cada comunidad se reparta, más o menos, según población para gastos sociales o el territorio para infraestructuras, etcétera, y deje sin asignar un porcentaje que se destine a intereses nacionales como inversiones estratégicas, I+D o fondos de redistribución?
Los políticos, para variar, no queriéndolo ver y en vez de debatir sobre números lo hacen sobre emociones y sin aportar ni un sólo dato, o "se rompe España" o "el resultado será una mejor integración". 0 de debate, 10 de gritos y aunque unos chillen más que otros el resultado es el mismo.
Los datos están sacados de la Wikipedia (España, Aragón, Cataluña y Andalucía, salvo la economía andaluza).
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