Cambia tu fondo de armario

Ayer llegué por casualidad a la columna que Chuck Norris escribe en un periódico digital. Nada extraño en un tío que creó el Cañón del Colorado al toser por poner un ejemplo, pero ejemplos de que es un superhéroe hay a patadas (giratorias, por supuesto).

La cosa es que me llamó la atención un banner de publicidad en el que salía una tía con una camiseta en la que se leía junto a Hillary Clinton: "Re-defeat Communism". La página enlazada es una empresa que se dedica a vender camisetas conservadoras. ¿Hillary Clinton comunista?, ¿desde cuándo?, ¿se convirtió en una peligrosa comunista al apoyar la Patriot Act, cuando defiende el déficit cero o cuándo dijo que quería que en las escuelas se impartieran valores religiosos?.




Seguí echando un vistazo y me encontré verdaderas joyas. La que más me gustó fue la del tour del Ejército yanqui, el Freedom World Tour, como si de un grupo de rock se tratara; con sus actuaciones pasadas, Europa en la Segunda Guerra Mundial, la primera y segunda Guerra del Golfo y futuras, Irán (en próximas semanas se sabrá), Corea del Norte y Siria. Alemania y Francia no pudieron ver el espectáculo de los militares en 2003 y encima han castigado a los franceses sin nuevas liberaciones; con lo que ha cambiado el significado de esta palabra en 60 años, es una buena noticia para ellos.


Otras camisetas guapas son las dedicadas a las armas, sobre todo la de "viva la diversidad" y "elige: víctima o dueño de armas". En otras secciones destacan la que lleva el lema "Árbol, soga, periodista", la que compara a los militares con superhéroes o las que son para el perro, una que pone "muerdo a los liberales" y otra con "veterinarios no, veteranos sí". Porque los animales también tienen derechos. Para los bebés conservadores también tienen camisetas, piensan en todo estos neocons.