lunes, febrero 11, 2008

No nos olvidamos

Aunque con más retraso del que esperaba y viendo que las cosas siguen igual quisiera recordar al amplio público que lee este blog un cuento maravilloso.
El cuento se llama "dos años después" y habla sobre una ciudad que tenia su propio estilo y forma de vida, pero de repente un día hace dos años todo se paró y la ciudad se durmió.
Cerraron un estilo de vida, una forma de pasar las noches y lo peor de todo no fueron por los vecinos y no dieron oportunidades de cambio.
Pasaron las elecciones y ganó el de siempre se hablo durante estas pasadas elecciones en el problema del "ocio juvenil" de la ciudad y todos TODOS preferían mirar para otro lado.
Murieron personas y prometieron cambiar las cosas pero TODO sigue igual. (Q.E.P.D.)
No hay alternativas o peor aún no hay medios para desplazar a la gente que sale los jueves, viernes y sabado, el ayuntamiento de Huesca no ha hecho nada para arreglar esta situación. Los taxis no quiere llevar a la gente (normal yo como tú señor lector no aguanto a los borrachos mientras trabajo, no pagan, pueden vomitar o incluso amenazarme con algun objeto por pensar que es caro el servicio).
Y me imagino que las discotecas están cansadas de pagar un servicio que deberia sustentarlo el ayuntamiento de Huesca como hacen la MAYORIA de las capitales que tiene la marcha fuera de su centro neurálgico, no hablo sólo de los servicios de Madrid o Barcelona ciudades como Lleida dispone de autobus nocturno.
Es deplorable que cada hora pase un autobus en una capital de provincia para llevar a la gente a las afueras de la ciudad para seguir disfrutando de la noche.
Y encima si no cogemos el coche va la policía y te registra cuando intentas ir andando los dos kilómetros que hay desde el centro de la ciudad hasta las discotecas.
¿Que pasa señor Elboj y señor Felipe que a de morir más gente para que haya autobuses nocturno? ¿Dos no son suficientes?
Desde elsaltoalvacio no nos olvidaremos de este triste aniversario porque creemos que el principio del fin de esta mal llamada ciudad empezó aquella noche fría de jueves.

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